HOMBRE QUE GRITA NUESTRA VERGÜENZA
HOMBRE QUE GRITA NUESTRA VERGÜENZA
Por Laura Ciancaglini
Argentina residente en Barcelona
De frente al atraco de centurias en el continente saqueado por los fuertes, la novedad emerge en un grito. Ojos infectados por la desmesura de lo injusto piden auxilio para dar saltos inútiles en la tiniebla del corral, y andar lo libre.
El subsahariano nos pide que sepamos algo de los actos despiadados; nos araña la razón; nos desmaya el empeño consumista en una instantaneidad de lo imposible de no ver y desoír. Mirar, luego, su rostro encadenado envilece sin pausa nuestro desayuno.
Los periódicos del mundo publican el trasiego de autobuses que lo llevan esposado con otros inmigrantes, camino al desierto de la muerte. Parten raudos como transporte de ganado enfermo, para ser sacrificado lejos de la vista de los hombres gentiles que se enteran, indignados, de estas cosas. Describen en sus crónicas los pormenores de una travesía, construida a buen resguardo de alguna tibia interpretación comprometida del suceso.
Lo flagrante en lo visual de nuestra foto, reduce el terrorismo estatal marroquí (y su colaboración española), a la información minuciosa de un mero hecho de lo dado.
Pero nuestro hombre sigue gritando con las fiereza de un animal acorralado en la trampera. Tendrá algún tiempo en su viaje de recordar a su madre muerta de SIDA hace tres años, o a sus amigos de la infancia en Senegal, o a su padre asesinado en alguna emboscada hace ya tiempo. Los ojos del dolor ancestral de sus mayores nos miran, enrojecidos, desde esa foto que en una semana o menos, ya nadie tendrá en su campo lábil de memoria.
5 comentarios
Salocin -
osvaldo -
Tal cual. Excelente artículo.
Tendremos que transformar en propuestas y unirnos. "Trabajo sin fronteras", libre circulación de trabajadores, entre otras cosas, proponemos.
Quizás el papel de España sea más decisivo que el de simple "cómplice" a partir de la negación de su propia Memoria Histórica, con miles de víctimas de la represión franquista, aún hoy desaparecidos. País de libre circulación de la especulación financiera y el negocio armamentista, más allá de la postura del actual gobierno con respecto a IRAK, sigue con Afganistan, Pakistan y lo que es peor la futura invasión a IRÁN.
Por supuesto que agradecería, que pudiésemos contactarnos.
Un abrazo
Osvaldo
sol -
Me gustaria que te contactes conmigo. Desde ya muchas gracias. Saludos
Ignacio Borrego -
Eva Aloisio -
ese fue el grito de la pena que sintio todo el mundo los marroquies tendrian que tener verguenza pero no...no les importa.
saven que? a nosotros si que nos importa que detengan a una generacion propia que deven formar un hogar sin nadie que los moleste. ese fue mi comentario.